Ex-libris

Nacido en París en 1830, fue un notable abogado, escritor, académico y político español. Hijo de Francisco Silvela y nieto de su abuelo homónimo, ambos hombres públicos y juristas. Fue hermano del segundo Francisco Silvela. Figuró en las filas de la Unión Liberal de Ríos Rosas. Diputado desde 1863, pronto intervino en varios debates que le dieron fama de orador intencionado y hábil. O'Donnell confió a Silvela la Dirección general de Instrucción pública, lo que no le impidió combatir algunos proyectos de aquel Gobierno. En 1869 pronuinció un notabilísimo discurso en el que defendió el sufragio universal, la libertad religiosa, de imprenta, de reunión y asociación, todo dentro de una forma monárquica del Estado. Después de la proclamación del general Serrano como regente, Silvela obtuvo la cartera de Estado bajo la presidencia de Prim y trabajó por la candidatura del duque de Montpensier al trono; pero al convencerse de que ésta había fracasado, se retiró del Gobierno y permaneció alejado de la política hasta la proclamación de Alfonso XII, y aunque no había contribuido a ella no pudo ocultar sus simpatías por el nuevo monarca, acabando por ingresar en el Partido Conservador acaudillado por Cánovas del Castillo. Cánovas le nombró Ministro de Estado el 14 de enero de 1877, conservando el cargo hasta marzo de 1879 en que fue sustituido por el marqués de Molíns. El hecho culminante de su actuación ministerial fue el arreglo arancelario entre España y Francia. Fue luego Consejero de Instrucción Pública y en 1884 Embajador de España en París, cargo que dimitió al año siguiente para ocupar su escaño en el Senado, del que fue vicepresidente en dos ocasiones. En 1883 fue nombrado Senador Vitalicio. En 1870 ingresó en la Real Academia Española. Fue elegido Académico de Número de la Real Academia Española y de la Historia. Murió en Madrid en 1892.

Corrales y Sánchez, Enrique, Apuntes biográficos de Manuel Silvela. Madrid, 1899

Silvela, Francisco, Necrología de D. Manuel Silvela y de Le-Vielleuze. MAdrid, 1902